La Diputación de Gipuzkoa ha mantenido este martes una reunión con 16 alcaldes de municipios de Goierri y Tolosaldea afectados por las inundaciones del pasado viernes para hacer una valoración inicial de los daños con el objetivo de tomar nuevas medidas, como crear un paquete de ayudas económicas para los pueblos afectados o solicitar la declaración de zona catastrófica. De este modo, en este momento se sigue trabajando en la limpieza de carreteras y bidegorris, al tiempo que se evaluarán las afecciones en una veintena de empresas afectadas y se cuantificarán los daños producidos en accesos a caseríos para valorar posibles actuaciones.

Así lo ha dado a conocer la portavoz foral, Irune Berasaluze, tras la celebración del Consejo de Gobierno, explicando que la reunión ha contado con la participación de la diputada general, Eider Mendoza; el diputado de sostenibilidad, José Ignacio Asensio; el diputado de Promoción Económica, Unai Andueza; el diputado de Equilibrio Territorial, Xabier Arruti; el diputado de Infraestructuras Viarias, Felix Urkola; y los alcaldes de Abaltzisketa, Alegia, Altzo, Anoeta, Baliarrain, Berastegi, Berrobi, Elduain, Hernialde, Ibarra, Ikaztegieta, Larraul, Lazkao, Lizartza, Orendain y Tolosa.

En todos estos municipios se sigue trabajando en la limpieza de carreteras y bidegorris que, aunque ya están abiertos, todavía cuentan con restos de las riadas. Al mismo tiempo, la reunión permitirá valorar las próximas actuaciones que se centrarán principalmente en dos ámbitos. Por un lado, evaluar los daños de una veintena de empresas afectadas de Alegi, Amezketa e Ikaztegieta para, al igual que se ha llevado a cabo tras las inundaciones en Ezkio, Gabiria y Ormaiztegi hace unas semanas, dotarles de los medios técnicos que necesiten para reanudar su actividad con normalidad; y, por otro lado, cuantificar los daños producidos en los accesos de los caseríos para elaborar informes técnicos y valorar posibles actuaciones con Etorlur.

Un operario limpia las calles tras las inundaciones. Ruben Plaza

“Tenemos que trabajar todas las instituciones y lo fundamental ahora mismo es coordinarse”, ha apuntado Berasaluze, que ha explicado que los Ayuntamientos deberán hacer una valoración de los daños, de igual modo que la Diputación deberá hacer la correspondiente con las infraestructuras que están a su cargo. Por ello, harán falta “unos días para cuantificar” las posibles medidas, entre las que se valora la aprobación de un paquete de ayudas económicas para los municipios afectados e incluso la solicitud de declarar el lugar como zona catastrófica.

"Estamos a disposición de todos los alcaldes"

Según ha explicado Berasaluze, entre la noche del viernes y el domingo a la mañana se registraron 53 incidencias en carreteras y se atendieron 190 avisos de bomberos relacionados principalmente con inundaciones, agua en calzada y corrimientos de tierra. Además, durante la madrugada del sábado, 42 bomberos y más de 20 vehículos de los parques de Tolosa, Ordizia, Legazpi, Azpeitia, Zarautz e Irun fueron movilizados, y durante todo el fin de semana más de 40 bomberos participaron en la limpieza de las zonas afectadas.

Gracias a ello, la red viaria quedó 100% restablecida en menos de 72 horas, aunque se sigue trabajando en ella, principalmente asegurando taludes y revisando caminos que pudieran verse en una situación similar en caso de que vuelva a llover. “Los alcaldes están desbordados. Muchos de ellos han estado limpiando sus pueblos y se tratan de ayuntamientos pequeños con pocos recursos técnicos. Estamos a disposición de todos ellos”, ha indicado la portavoz foral, que ha querido agradecer la buena disposición de todos los participantes en la reunión y de los equipos de emergencia y de los vecinos de las localidades. “Gipuzkoa ha demostrado una vez más que es un territorio solidario”, ha finalizado. 

"Queda trabajo por hacer"

Por su parte, la diputada general, Eider Mendoza, en un vídeo trasladado a los medios de comunicación ha afirmado que "todavía queda trabajo por hacer" y que la reunión ha servido para identificar "aquellos lugares que merecen una prioridad de actuaciones".

"Somos un territorio acostumbrado a la colaboración y ha sido seguirá siendo", ha añadido, recordando que la tromba de agua no ha dejado ni un daño personal en el territorio y dando las gracias a "las personas, vecinos, instituciones, empresas y técnicos de la Diputación" que han trabajado para hacer frente a los estragos de estas inundaciones.