'Izandakoak. Lo que fue es' la carta de presentación de la exposición que reúne imágenes de edificios y construcciones que en otro tiempo definieron el rostro urbano de la villa cerrajera, pero que hoy solo sobreviven en la memoria colectiva y en antiguas fotografías en blanco y negro. La siempre inquieta y divulgativa asociación Arrasate Zientzia Elkartea (AZE) es la impulsora de esta muestra que abrirá sus puertas el 5 de junio en el claustro de Kulturate. 

“En esta ocasión os proponemos una exposición muy particular que, posiblemente, genere añoranzas en gran parte de la población”, destacan los miembros de AZE. Un trabajo que rescata del olvido a edificaciones, muchas de ellas emblemáticas, que el tiempo borró. Que fueron demolidas para dar paso a nuevos desarrollos o se perdieron entre la modernización. Desde el centro neurálgico del municipio que se ha ido transformando fruto de los cambios urbanísticos, hasta desaparecidas empresas, las Escuelas Viteri o el viejo cementerio de Aldai; cada imagen es una puerta abierta a un pasado que todavía palpita en quienes lo vivieron. “Hemos recogido 50 motivos diferentes”, detalla Javier Bengoa.

José Ángel Barrutiabengoa y Javier Bengoa en la presentación de la exposición.

José Ángel Barrutiabengoa y Javier Bengoa en la presentación de la exposición. Anabel Dominguez.

Paisaje urbano y rural

Revisando el fondo fotográfico, que con mucho mimo conservan los integrantes de AZE, vieron que contaban con material suficiente para compartir con la ciudadanía el ayer de Arrasate, a través de una serie de documentos visuales que, al mismo tiempo, son fragmentos emocionales de la identidad urbana que alguna vez fue. “Es una muestra fotográfica de numerosos elementos que conformaron el paisaje urbano y rural de nuestro pueblo y que pasaron a 'mejor vida' ante el imparable avance de la modernidad”, apuntan sus promotores.

Casi un siglo de historia en 120 instantáneas, tomadas desde la década de los años 30 hasta nuestros días. “En estas fotos se aprecian los momentos finales de muchas edificaciones y estructuras del entramado municipal, en la actualidad convertidas en nuevos complejos urbanísticos, paseos, avenida, plazas…”, señala José Ángel Barrutiabengoa.

A la colección de AZE se suman las escenas de diversas épocas que con sus cámaras inmortalizaron Indalecio Ojanguren, Valeriano Martínez, José María Lasagabaster ('Wentxes'), Carmelo Letona, Txema Urcelay y Aitor Iturriaga.

El desaparecido cuartel mientras las máquinas proceden a su demolición. Fondo fotográfico de Arrasate Zientzia Elkartea.

El cambio que ha experimentado Arrasate

El cine Gurea, el convento de San Agustín, la carnicería Olatxo, el cuartel, el hostal de Musakola, la panadería de Maala, los caseríos de Larrea, Zabale (Bedoña), Etxaluze y Gomestio, Arbolapeta, el Portal de Abajo (Portalón), la antigua fábrica Polmetasa, Villa Amparo, la ermita de San Josepe, los edificios que precedieron al frontón Uarkape…, y también, curiosamente, la última cabina que sobrevivió en la localidad (en San Andrés) protagonizarán este recorrido visual. “Hay imágenes de inmuebles en el instante en el que se están derribando y otros que ya no existen. Eso es lo que queremos mostrar: cómo ha ido cambiando Arrasate con el paso de los años, porque la memoria es lo más frágil que tenemos”, insiste Bengoa.

La exposición podrá visitarse del 5 al 21 de junio, de 17.30 a 20.30 horas. Una oportunidad para recordar, no olvidar y, ¿por qué no?, para tender un puente entre generaciones y enseñar que el pueblo de hoy está hecho de lo que ayer se construyó.